Saltar al contenido
Esta semana se filtró la hoja de ruta del gigante nipón, un plan estratégico que contempla reducir su presencia en ciertas regiones, para priorizar a Norteamérica y Asia, dos de las regiones más redituables para la compañía.
El documento revela un giro estratégico del fabricante, que pondrá el foco en Estados Unidos, China y Japón, una novedad que ha hecho encender las alarmas en Europa, puesto que podría significar el cierre de algunas de las factorías que la marca asiática posee en diversos países.
Un portavoz de Nissan reveló que a pesar de la nueva estrategia, la compañía no está pensando en abandonar los mercados de Europa. El fabricante aseguró además que el lanzamiento de la nueva generación del Juke el pasado mes de noviembre ha sido el primer paso en la renovación de su gama europea, aunque no obstante, la fuente no confirmó si la firma tiene decidido mantener operativas a sus factorías de Sunderland y Barcelona.
La operación de Nissan en Europa depende en gran medida de los Qashqai y Juke que los nipones fabrican en la planta de Sunderland, en Reino Unido. A pesar del éxito de estos dos modelos, especialmente del primero de ellos, las cuentas el pasado año han cerrado en rojo en Europa, que ha sido la peor región en términos financieros, con perdidas equivalentes a 222 millones de euros.
Nissan ya había descartado producir al nuevo X-Trail en Reino Unido, un todocamino que finalmente llegará directamente importado desde Japón, impulsado por el acuerdo de libre comercio entre la Union Europea y Japón, que contempla la eliminación progresiva de aranceles.
La producción en la planta de Barcelona se redujo el año pasado, luego de el cese de la producción del Pulsar y de algunas versiones del NV200 y las cosas no están yendo bien para el resto de los modelos, dada la baja demanda del Renault Alaskan y la decisión de la firma alemana de cancelar al pick-up clase X.
Se espera que Nissan anuncie formalmente su nueva estrategia el próximo 28 de mayo.
