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Luego del levantamiento de las sanciones internacionales que dejaron de tener vigencia en 2015, las marcas de origen francés habían iniciado un período de expansión en Irán.
En primer término el Grupo PSA a través del fabricante local Iran Khodro, anunciaba su plan para producir algunos modelos de Peugeot y Citroën,y poco mas tarde Renault daba a conocer sus planes de expansión en Oriente Medio através de una serie de inversiones para producir vehículos localmente.
Sin embargo, a dos años de aquella decisión, las condiciones han vuelto a cambiar, ya que el gobierno estadounidense ha renovado las sanciones contra Iran, una situación que ha dejado a las firmas francesas en una situación desventajosa una vez más.
De acuerdo a reciente declaraciones del director de operaciones de Renault, Thierry Bollore, es probable que Renault suspenda sus operaciones en Irán en forma definitiva. Bollore afirmó que la compañía se encuentra buscando nuevas oportunidades de negocios, particularmente en África, para de este modo lograr compensar las pérdidas en Irán.
La marca del rombo ha estado presente en Irán desde el año 2003, produciendo vehículos en conjunto con los locales Iran Khodro y Saipa, con una actual capacidad de producción de unas 200.000 unidades al año y si bien las nuevas inversiones todavía no se habían concretado, durante la primera mitad del año sus ventas cayeron un 10% y desde la compañía consideran que debido a las políticas económicas implementadas por el gobierno iraní, las ventas estarían cerca de cero en la segunda mitad de éste 2018.
Pero la firma del rombo no ha sido la única perjudicada ante este cambio en las reglas del juego, ya que el Grupo PSA también se ha visto afectado por las nuevas condiciones. El fabricante francés, que actualmente produce en Irán modelos de Citroën y Peugeot, ha reducido sus actividades luego de que Trump abandonara el pacto nuclear con Irán el pasado mes de mayo.
