Colin Furze es un plomero británico, pero es también por hobby un científico que cuenta con una colección de extraños inventos tales como unas botas imantadas que desafían la gravedad, el scooter más rápido del mundo, y una bicicleta para entrega de pizza equipada con lanzallamas, entre otras excentricidades.
Su ultima creación sine embargo fue un paso mas allá. Se trata de un karting que utiliza un motor a reacción, en base a una turbina alimentada con una mezcla de diesel y gas para dar potencia a su sistema de chorro.
El sistema combina dos tanques de gas y uno de diesel, que trabajan en combinación con un soplador de hojas para impulsar al karting hasta alcanzar los 100 kilómetros por hora, algo escasos para un sistema de propulsión a chorro, pero espectaculares por las llamas que lanza a su paso.
Pero lo mejor es que lo veas en el video adjunto a continuación. Niños, no intenten esto en casa.