Luca di Montezemolo ha reaccionado con decepción a las sugerencias de que su presidencia fue la responsable de la decadencia de Ferrari, tras las declaraciones que Sergio Marchionne y Maurizio Arrivabene han hecho a los medios de comunicación a principios de esta semana, admitiendo que es imposible que Maranello pueda lograr el título de la Fórmula 1 durante la próxima temporada 2015.
Marchionne aseguró que la Scuderia está llegando desde el fondo, debido a decisiones tomadas por otras personas, además de admitir que él se oponía a la llegada de Montezemolo como el nuevo presidente del Formula One Group.
Montezemolo reaccionó diciendo a la agencia de noticias italiana Ansa que, en relación con los comentarios de Marchionne, se prometió a él mismo a no generar polémicas para el profundo amor que tiene por Ferrari, por el respeto que se merecen los que allí trabajan y que han trabajado en proyectos que ganaron en la pista.
Además aseguró haber sido testigo durante las últimas semanas de declaraciones reiteradas que en algunos casos no se corresponden con la realidad, pero manifestó no tener intenciones de responder a esas provocaciones. Culminó asegurando que el éxito deportivo, mayor que el alcanzado por cualquier otro equipo, la fuerza y el prestigio de la marca en el mundo y los resultados financieros para el grupo FCA que confirman que este año va a ser el mejor en la historia de la compañía, hablan por sí solos.