Hacia fines del año pasado Fiat Chrysler Automobiles y Groupe PSA formalizaron un acuerdo de fusión, un acuerdo a través del cual ambos gigantes de la industria automotriz se convertirán en el cuarto mayor fabricante mundial de automóviles.
Esta fusión abre un abanico de nuevas opciones, con nuevas posibilidades de compartir arquitecturas que hasta este momento eran impensadas. En el marco de ésta fusión, podrán comenzar a surgir nuevos vehículos de cara al futuro y los primeros rumores acerca de las marcas Opel y DS ya se han echado a rodar.
Hace unas pocas semanas asistimos al debut virtual de la tercera generación del Fiat 500, que originalmente iba a ser revelada en el Salón del Automóvil de Ginebra 2020, el cual finalmente ha debido tener que ser cancelado a causa del avance del Coronavirus.
En esta nueva entrega, el Fiat 500 será solamente eléctrico ya que esta nueva generación no contempla el lanzamiento de ningún tipo de motor de combustión. Eso sí, Fiat Chrysler Automobiles anunció que la actual generación del 500 continuará a la venta por mucho tiempo más, para cubrir la demanda de los clientes que busquen un modelo más asequible y que ahora además incluye un sistema de propulsión híbrido.
Pero el nuevo Fiat 500e podría no estar solo dentro de la gama de urbanos eléctricos de Fiat Chrysler Automobiles, puesto que el modelo italiano podría servir como base para el desarrollo de la nueva generación del Opel Adam, además del inédito DS 1.
Los nuevos DS 1 E-Tense y Opel Adam-e podrían estar sustentados por la misma plataforma empleada por el nuevo Fiat 500e, compartiendo además el mismo motor eléctrico de 120 CV, junto a una batería de 42 kWh con 320 kilómetros de autonomía.
Se prevé que los nuevos Opel Adam-e y DS 1 E-Tense sean producidos en la factoría italiana de Mirafiori junto a la nueva generación del 500, unas instalaciones con capacidad para ensamblar unas 80.000 unidades de vehículos eléctricos al año.
No habrá que descartar además una versión eléctrica del Lancia Ypsilon, una nueva generación del único modelo que la firma italiana aún mantiene a la venta y que podría marcar el retorno de Lancia a los mercados mundiales.