A pesar de contar con un diseño agradable, el Honda CR-Z nunca logró funcionar demasiado bien desde el punto de vista comercial. En los Estados Unidos sus niveles de ventas no paran de caer y durante el mes de septiembre marcaron el punto mas bajo del año.
El volumen mensual había alcanzado su pico máximo en el año 2011, cuando lograron colocar un máximo de 1.819 unidades durante el mes de abril de ése año. Ya en el año 2013 comercializaron un total de 4.550 unidades del CR-Z, lo que significaron unas 379 unidades al mes. Durante los primeros ocho meses de 2014 Honda estaba comercializando a razón de 337 unidades al mes.
Las ventas totalizaron las 11.330 unidades en 2011, cuando el modelo vivió su momento de mayor éxito comercial, pero se desplomaron un 63% tan solo un año después, ya que en 2012 se comercializaron 4.192 unidades.
Pero también es cierto que en muchos aspectos se trata de un producto único, ya que si bien puede estéticamente considerarse como un sucesor del CR-X de los años noventas, también es cierto que se trata de un híbrido que por sus cualidades es dificil de catalogar.
Se trata de un bi-plaza, de estilo deportivo y con una eficiencia energética bastante cuestionable. Durante su pico máximo de éxito comercial en el mes de abril de 2011, el Honda CR-Z representaba el 2.6 % de las ventas de automóviles de pasajeros de Honda, una cifra que cayó a apenas el 0,4% en septiembre de éste año, un 86% por debajo de su momento de mayor éxito comercial.
Honda no se ha pronunciado aun acerca de cual será el futuro comercial del CR-Z, pero los números no brindan un panorama alentador. Quizás con un nuevo enfoque, el producto que tan solo lleva 4 años en el mercado podría tener un mejor destino que los desaparecidos CR-X y Prelude.