Hace algunos años, a finales de los años sesenta y mucho tiempo antes de que Horacio Pagani se convirtiera en un fabricante de autos, existió otro Huayra, era un Ford y Heriberto Pronello, su creador, lo había concebido especialmente para las competencias de sport prototipos, una categoría automovilística que era muy popular por aquellos años.
Pronello era un gran amigo de Horacio Pagani y era además un diseñador de autos de carrera. Su creación fue específicamente desarrollada para para el equipo oficial Ford de la categoría Sport Prototipos del año 1969 se lo denominó Huayra Pronello Ford,
Huayra Pronello Ford
El Huayra Pronello Ford, como se lo conoció, montaba un motor V8, basado en el que equipaban a las camionetas F-100 de la época. Con 4 carburadores Webber 48/48 verticales, erogaba 320 HP a 7000 RPM.
La mecánica, era provista directamente por la fábrica y llevaba la preparación para competición de un grupo de especialistas comandados por el Ingeniero Guillermo Mikulán.
El equipo oficial estaba conformado por los pilotos Carlos Pascualini y Carlos Reutemann. Por aquellos años, existió un fuori serie (fuera de serie) basado en un SP, al cual se lo denominó Huayra Pronello Stradale.
Huayra Roadster
El coche montaba esta vez mecánica Chevrolet, con árbol de levas con preparación especial, tapa rebajada, carburador Weber horizontal 40/40 entre otros elementos especiales.
Equipaba una caja de cambios ZF, diferencial autoblocante y frenos a disco en las cuatro ruedas, elaborados por Pronello. En el interior, estaba equipado con instrumental de la casa Jaeger, butacas de cuero anatómicas y una palanca de cambios bien corta y deportiva. Montaba neumáticos traseros de 11 pulgadas de ancho. La altura total de éste GT, era de 0,99 cm.
Homenaje al Huayra original
Pagani, con su Huayra, ha rendido homenaje a aquel Huayra de los años sesenta. Horacio es un gran admirador de estos vehículos, que le sirveron de inspiración para sus inicios en el mundo del diseño automovilístico.
Además, Horacio se ocupa de que sus raíces Argentinas estén siempre presentes en todas sus creaciones. En sus comienzos y en la época de su primer vehículo, el homenaje fue para el famoso viento patagónico Zonda, un coche que originalmente llevaría el nombre del quintuple campeón de Formula 1 Juan Manuel Fangio.
Don Juan Manuel, que era un buen amigo de Pagani, le brindó un apoyo decisivo para la concreción de su proyecto de super deportivo. Gracias a los contactos que el chueco tenía en Mercedes-Benz, se allanó el camino para que la creación del argentino pudiera montar una mecánica de la casa bávara, AMG. Casi al mismo tiempo que el Zonda viera finalemente la luz, fallecía Fangio, por lo que respetuosamente Pagani decidió cambiar el nombre a Zonda.