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Corría el mes de marzo del año 1995 cuando mercedes presentó una novedad que pocos años después se extendiera al resto de los fabricantes, incluso hasta el punto de tornarse obligatorio en el mercado europeo. Se trataba del programa electrónico de estabilidad, mas conocido por sus siglas ESP.
El ESP cumplió 20 años. Mercedes inició el camino que culminó con su obligatoriedad en 2011.
Mercedes-Benz fue pionera en el desarrollo de sistemas de seguridad electrónicos. Así fue como en el año 1978 presentaron los frenos anti bloqueo ABS y el control de tracción en el año 1985, aunque no fue hasta 10 años mas tarde que el control de estabilidad llegó al mercado.
El primer producto en recibirlo fue el Mercedes S 600 coupé, para poco tiempo después hacerlo extensivo al sedán Clase S y al Rodaster SL. Por aquel entonces la marca alemana lo ofrecía de serie en sus modelos equipados con motor V12, mientras que se transformaba en un opcional para las unidades que montaban el propulsor V8.
Dos años mas tarde y por accidente, fue la propia Mercedes la encargada de dar vida a una verdadera revolución, ya que un incidente ocurrido durante una prueba efectuada por el periodismo al flamante Clase A, determinó que el ESP se hiciera extensivo como equipamiento de serie a la gama completa de modelos de la marca.
Durante una prueba de conducción, el piloto llevó al Clase A al límite, efectuando la maniobra conocida como ‘prueba del alce’. Esto motivó que el vehículo volcara y poco tiempo después Mercedes anunció que el ESP sería de serie para el Clase A, aunque no tardó en hacer lo mismo con el resto de los modelos de su gama.
Esto motivó que el resto de los fabricantes sugieran el mismo camino y llevó a que hacia finales de 2011 el programa electrónico de estabilidad se transformara en obligatorio para los productos comercializados en Europa.
