Dos conductores circulaban como suele ocurrir en Rusia, luchando por ganar una posición en medio del trafico, como si tuvieran la necesidad de probar cuál de los dos es el más fuerte o el mas osado.
Pero como no podía ser de otra forma, la historia acabó mal, con un Lada 2105 totalmente fuera de control que acabó estrellado por sus propios medios, sin que siquiera alguien o algo lo tocara.
Quien pudo haber corrido peor suerte, pero que afortunadamente resultó ileso, fue el pobre hombre que se encontraba justo aparcado a un costado de la carretera con la puerta de su coche abierta. Al escuchar el sonido del Lada fuera de control, atinó a correr su cuerpo, lo que le permitió salvar su pellejo por apenas unos pocos centímetros.
La misma suerte no corrió la puerta de su coche, que sufrió el impacto del Lada, que literalmente la arrancó de sus manos. El conductor del otro vehículo, que es justamente el que grababa la acción con su cámara de salpicadero, estalló en una carcajada al ver lo ocurrido.