La firma germana presentó finalmente a la versión definitiva del Volkswagen T-Roc Cabrio, un nuevo tipo de carrocería para el SUV compacto alemán.
El Volkswagen T-Roc Cabriolet recurre a una tradicional capota de lona, que puede cerrarse y abrirse en solo 9 segundos, siempre que la velocidad sea inferior a los 30 km/h.
Este nuevo todocamino compacto descapotable de Volkswagen posee una carrocería de dos puertas y es más largo y bajo que la versión cerrada.
Dejando a un lado el exterior, si nos aventuramos en el interior del nuevo T-Roc Cabrio descubrimos que detrás encontramos dos plazas individuales, que se pueden abatir en caso de ser necesario aumentar la capacidad del maletero o de transportar objetos alargados. Vale recordar que la capacidad del maletero, que ahora posee 284 litros, se ha reducido considerablemente en relación al T-Roc convencional que posee 445 litros.
En el plano mecánico, el descapotable se despide de los motores TDI, ya que la oferta solo contemplará alternativas gasolina. Los clientes podrán optar entre el 1.0 TSI de 115 CV, mientras que como alternativa mas prestacional estará el 1.5 TSI que desarrolla 150 CV de potencia. En ambos casos se combinarán con un cambio manual de seis velocidades y el mas potente podrá también emparejarse con una caja de cambios de doble embrague DSG con siete relaciones.
La dotación será muy completa e incluirá similares características de seguridad y conectividad que las versiones con carrocería cerrada del T-Roc.
Esta nueva propuesta de Volkswagen ingresa en un territorio en donde hasta ahora solo encontrábamos al Range Rover Evoque Convertible.
Se trata de una arriesgada apuesta de la marca alemana, aunque considerando que la fiebre SUV no parece haber mermado, la idea no resulta, al menos inicialmente, tan descabellada. En todo caso habrá que ver si las ventas indican lo contrario. Solo el tiempo lo dirá.