En el marco del Salón del Automóvil de París tuvimos oportunidad de conocer al prototipo Volkswagen I.D., que anticipa la próxima familia de modelos eléctricos de la firma alemana.
Volkswagen tiene la necesidad de recuperarse del escándalo relacionado con la medición de las emisiones contaminantes de sus motores diésel y la mejor forma que han encontrado está relacionada con el desarrollo de una serie de vehículos cero emisiones.
Desde la compañía señalan que tienen las intenciones de transformarse en líderes mundiales en el campo de los vehículos eléctricos, y para ello se han fijado el objetivo de lograr ser el primer fabricante en producir más de un millón de coches eléctricos. El plan contempla el desarrollo de algunas soluciones concretas para la solución de los problemas mas comunes de los coches eléctricos actuales.
Estos nuevos productos estarán desarrollados sobre una nueva arquitectura para vehículos eléctricos denominada MEB (Modularer Elektrifizierungsbaukasten), una plataforma modular que es lo suficientemente escalable para soportar vehículos desde el segmento A al D.
Con los costes de las baterías en descenso, los sistemas de cargas rápidos y las autonomías extendidas, Volkswagen pondrá el foco en el precio del vehículo, el que para ellos es hoy día el principal obstáculo para lograr llegar a más clientes.
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