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Nada mas tentador que un superdeportivo en un hermoso camino sinuoso de montaña. Y si ese coche es nada menos que un Ferrari F40, y el camino es en los Alpes suizos en un día soleado, poco mas hay para agregar.
Hasta allí nos llevaron los muchachos de EVO, en éste Ferrari F4o al mando de Henry Catchpole quien montó una cámara en el tablero y compartió la experiencia en un video. Lo interesante es como se transmite el esfuerzo que a veces tiene que poner Catchpole para llevar al F40 como es debido, lo que deja en claro cuan diferentes eran los coches deportivos por aquellos años.
Es por ello que para conducir ha este Ferrari que debutó en el mercado en el año 1987, hay que poner una cuota de esfuerzo adicional a lo que los deportivos actuales nos tienen acostumbrados. El video, para ver con el volumen de los parlantes bien altos a continuación.
