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A nadie le resultará extraño que las matriculaciones de vehículos nuevos en Venezuela estén en cifras mínimas teniendo en cuenta que la economía del país está prácticamente parada.
Durante todo el año 2015 se comercializaron en Venezuela tan sólo 17.268 unidades. El mercado cerró con una caída del 28,8 % respecto al año anterior y Chevrolet fue la marca líder.
Toyota Venezuela comenzó a exportar piezas construidas con materiales 100% locales. La primera exportación tuvo como destino Argentina, pero esperan poder llegar a mas mercados Latinoamericanos.
Cuando parecía que el mercado venezolano no podía estar atravesando un peor momento, las cosas lograron empeorar aun mas. Durante septiembre, las ventas se desplomaron un 69,2%, totalizando apenas 591 ventas en todo el mes.
Venezuela recibió las primeras unidades de Chery Orinoco, destinadas a mejorar la flota de taxis. El acuerdo con China incluye también la provisión de autobuses Yutong.
De mal en peor. El mercado venezolano del automóvil sigue pasando muy malos momentos y de aquellas cifras que se lograban año tras año en la segunda mitad de la década pasada ya no queda nada. Para que te hagas una idea durante julio sólo se vendieron 1.446 unidades, lo que representa un descenso del 14,4% respecto al mismo mes del año anterior
El Dodge Forza se ubicó en el mes de mayo como el vehículo mas vendido de Venezuela, con 230 unidades comercializadas. Las ventas totales descendieron un 41 % respecto a igual período del año anterior.
El Ministerio de Comercio de Venezuela ha firmado estos días un convenio con la china Chery Automobile para importar a Venezuela 13 mil unidades que intentarán cubrir la demanda generada por la paralización de la producción local.
Hacia fines del año pasado, el gobierno venezolano decidió regular los precios de los coches nuevos y usados, además de prohibir a las terminales adquirir moneda extranjera. Seis meses después la producción cayó un 80 %.
Adquirir un automóvil nuevo en Venezuela se transformó en una tarea con resultados inciertos. Las restricciones cambiarias para las terminales automotrices tiene a los concesionarios prácticamente sin vehículos que ofrecer. La mayoría de las marcas solo lograron vender 3 o 4 vehículos en los primeros meses del año y la lista de espera ya alcanza los 5 años.