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Presentado como primicia mundial en el Salón del Automóvil de Shanghai, el Volkswagen CrossBlue Coupé es el más radical de los SUV actuales, aunque al mismo tiempo es uno de los que menos combustible consume. Su potencia es imbatible, ya que es un híbrido que produce en forma conjunta nada menos que 415 CV de potencia.
El CrossBlue Coupé es una variante con carrocería deportiva del CrossBlue presentado en Enero en el Salón de Detroit. Ha sido desarrollado sobre la plataforma modular MQB y que ya utilizan diversos modelos del grupo VAG como el Golf, el A3 o el Leon.
Sus dimensiones son importantes, ya que es aún más grande que el Volkswagen Touareg, ofreciendo una carrocería de 4.89 metros de longitud, 2.01 m de ancho y 1.68 m de altura con una distancia entre ejes de 2.98 metros. En el diseño de su carrocería se destacan sus líneas con trazos niel angulosos, aunque su principal atractivo pasa por el apartado mecánico.
Para la motorización del CrossBlue Coupé se ha elegido una mecánica híbrida que combina un motor V6 de 299 caballos con dos motores eléctricos ubicados uno en cada eje. En el tren delantero se aloja uno de 54 caballos, mientras que en el posterior otro de 116 caballos, con una potencia combinada de 415 caballos. Este conjunto mecánico le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 236 km/h.
Su arquitectura mecánica le permite obtener un consumo que ha sido homologado en 3 litros cada 100 km. Además su rango de autonomía es destacable ya que su depósito de combustible de 80 litros, en conjunto con las baterías de los motores eléctricos, le permite alcanzar los 1.190 km. sin necesidad de re abastecerse.
Para recargar las baterías, puede conectarse a la red eléctrica domiciliaria con un simple enchufe, abasteciendo a las baterías que se ubican debajo del túnel central. Además el sistema aprovecha la energía producida en los momentos de desaceleración y frenado para recargar el sistema de baterías.
El sistema está provisto de múltiples opciones de funcionamiento. Los modos de conducción son tres: Eco, Sport y Offroad y permite la conducción solamente en modo eléctrico, aunque con una autonomía de 33 kilómetros a un velocidad que no puede superar los 120 kilómetros por hora.
De todas formas si se supera esa distancia y la carga de las baterías no es suficiente, es posible cambiar la modalidad a tracción total, con la particularidad de que el motor eléctrico delantero genera la electricidad necesaria para el posterior, mientras que el eje delantero se mueve con la potencia transmitida por el motor V6. Además en el modo denominado Charge, el motor de combustión se transforma en un cargador de las baterías al generar electricidad.
El habitáculo está provisto de todo tipo de elementos típicos de un prototipo, con bajísimas posibilidades de llegar a un posible modelo de producción. En la consola central cuenta con una pantalla LCD de 10,1 pulgadas que permite comandar al navegador, el sistema de audio y los sistemas de conducción.
Para los asientos posteriores se han dispuesto dos iPad Mini alojados detrás de los reposa cabezas de los asientos delanteros, que permiten a los ocupantes de las plazas posteriores contar con sus propios sistemas multimedia.
El espacio de carga es amplio, ya que puede contener 537 litros de forma standard o ampliarse hasta los 1.100 litros al abatir los respaldos de los asientos posteriores.
