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Los Ford Fiesta y Ford Focus reciben una nueva variante de aspecto deportivo inspiradas en las versiones ST, pensadas para aquellos clientes que desean obtener un producto con aspecto deportivo, sin por ello tener que recurrir a un motor de muchos caballos.
En términos dinámicos tanto el Focus ST-Line como el Fiesta ST-Line disponen de una nueva puesta a punto del chasis, con unas suspensiones que han sido rebajadas en 10 milímetros.
En el caso del Fiesta ST-Line, la nueva versión puede adquirirse con su carrocería de tres o de cinco puertas y con una gama de motores que van desde los 100 CV del EcoBoost de 1.0 litro de cilindrada, un propulsor que también es ofrecido con 125 CV y con 140 CV. Además para aquellos clientes que deseen una opción diésel, podrán optar por el TDCi con 95 CV.
En cuanto a su estética, el Fiesta ST-Line recurre a una parrilla de tipo panal de abejas, paragolpes de diseño específico, faros antiniebla con molduras oscuras, difusor trasero y spoiler trasero integrado. Además dispone de llantas de aleación de 16 pulgadas de formato específico, emblemas ST-Line y un interior en donde destaca su tapicería con costuras en color rojo y volante revestido en piel con costuras grises.
El Focus ST-Line en tanto está disponible con el EcoBoost de 1.0 litro y 125 CV, EcoBoost 1.5 con 150 y 182 CV o el diésel TDCi de 1.5 litros con 120 CV ó 120 CV. Estéticamente dispone de unas llantas de aleación de 17 pulgadas, parrilla de panal de abejas, spoiler trasero, difusor posterior, etc.
Ford estima que un 10% de los compradores de los Focus y Fiesta optarán por las nuevas versiones ST-Line.
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