El nuevo gobierno italiano tiene grandes ambiciones en materia de movilidad sustentable ya que Luigi di Maio, el líder antiestablishment del Movimiento 5 estrellas, espera ver un millón de coches eléctricos en las carreteras italianas para el año 2022. Sin embargo, aún le queda a Italia un largo camino por recorrer para lograr materializar ese deseo.
La propuesta italiana es verdaderamente ambiciosa, ya que aspira a lograr superar a Noruega y convertirse en el mayor mercado de automóviles eléctricos de Europa. Di Maio pretende una gran ofensiva en materia de coches eléctricos y una drástica reducción en los vehículos con motores térmicos, con el objetivo es lograr colocar en el mercado un millón de automóviles eléctricos en un plazo de cuatro años.
Para comprender la magnitud de esta propuesta hay que analizar el actual mercado de coches eléctricos en Italia. Durante el pasado año se vendieron en Italia apenas 2.600 coches eléctricos, en un mercado de dos millones de unidades, por lo que pasar de menos de tres mil vehículos a un millón en poco mas de tres años, sin dudas requerirá de enormes esfuerzos, además de grandes inversiones en materia de instalación de infraestructura y ayudas en la compra, que de acuerdo a analistas del sector podrían costarle al estado italiano más de 10.000 millones de euros.
Las ayudas a la compra son la clave de éste proyecto y el gobierno estaría considerando incentivos por alrededor de 8.500 euros por automóvil, tal como ocurre por ejemplo en Francia, donde el pasado año se vendieron 10 veces mas coches eléctricos que en Italia. Además el gobierno necesitará del apoyo de compañías privadas como Enel para el desarrollo de la infraestructura necesaria y la instalación de unas 14.000 estaciones de recarga de aquí a 2022.
No se tarta de una idea nueva y Alemania ya lo ha intentado sin éxito. Ahora es Italia la que propone poner en circulación un millón de coches eléctricos, aunque la propuesta de di Mayo no especifica objetivos específicos mas allá del deseo de ver un millón de vehículos eléctricos en las carreteras italianas.