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Nacido como una suerte de reencarnación del CRX de principios de los años noventa, el Honda CR-Z nunca logró convencer al mercado, en parte por la apuesta de la marca de ofrecerlo solamente en versión híbrida. Y eso a pesar de que en su ultima actualización ofrece una potencia de 137 caballos de fuerza.
Consciente de sus limitaciones, la filial de Honda en los Estados Unidos desarrolló un paquete opcional que mejora sus prestaciones. Se trata de un kit de potenciación basado en la sobrealimentación, desarrollado por Honda Performace Development, que logra llevar la potencia del CR-Z hasta los 200 caballos de fuerza.
El paquete incluye la instalación de un compresor Rotrex que gira a 200.000 rpm, asociado a un intercooler Griffiths. Con estos cambios se incrementa la potencia en 67 caballos de fuerza, alcanzando los 200 cv con 230 Nm de par. Además se incorporó un escape deportivo de alto rendimiento, mejoras en el sistema de suspensiones, frenos mas grandes y nuevas llantas de aleación y neumáticos.
Además junto con el lanzamiento de éste kit de potenciación, Honda comenzó a ofrecer un diferencial de deslizamiento limitado y un embargue deportivo. El kit de potenciación para el CR-Z tiene un costo en los Estados Unidos de 5.495 dólares.
Philip LaPointe, quien se desempeña como director de Honda Performace Development (HPD) afirmó que éste kit es el primer paso para el desarrollo de una serie de productos similares que llegarán poco a poco al resto de la gama Honda. Al ser desarrollados por HPD, los kits pueden ser instalados en los concesionarios oficiales de la marca, conservando la garantía de fábrica.
La idea de cara al futuro es la de ofrecer los kits oficiales de HPD en todos los modelos y especialmente que esos paquetes de potenciación estén disponibles al mismo tiempo que un nuevo modelo sea introducido al mercado.
