Tras ocho ediciones, el plan PIVE llega a su fin, y esta vez lo hace en forma definitiva. El gobierno español ya había anunciado que éste sería su último año y su plazo de caducidad se cumple hoy.
Creado en el año 2012, el plan PIVE permitió a más de un millón de españoles acceder a la compra de un coche nuevo con descuento, que en su mejor momento alcanzó a los 2.000 euros.
A pesar que había quienes impulsaban una nueva prórroga del PIVE para lograr preservar los niveles de venta actuales, esto finalmente no ocurrirá, aunque con un mercado que atraviesa el mejor momento de los últimos años, tal vez no sea necesario. Las cifras proyectadas indican que éste año podría sobrepasarse ampliamente el millón de unidades matriculadas, tras superar la caída mas profunda de los últimos años cuando en 2012 apenas se comercializaron 700.000 vehículos.
Tras el fin de las ayudas del gobierno, los españoles seguramente continuarán adquiriendo vehículos a buen ritmo, teniendo en cuenta que la oferta actual es muy competitiva, con la mayoría de las marcas ofreciendo descuentos por lanzamiento y financiación, que muchas veces son bastante importantes.