Así de contundente fue la afirmación de Peter Schwarzenbauer, directivo de BMW, quien declaró pocos días atrás que el aún inédito MINI F56 que llegará al mercado en pocas semanas y que se basa en una nueva plataforma podrá contar con una gama compuesta por unas 10 variantes de carrocería.
El nuevo MINI utiliza la nueva plataforma modular de tracción delantera UKL. La tercera generación del modelo se estrenará en su versión tradicional, el Cooper, el mes próximo y mas adelante llegará el relevo para las demás variantes de carrocería. De todos modos Schwarzenbauer no aclaró si todas las versiones actuales tendrán un sucesor, asegurando que eso aún se encuentra en una etapa de desarrollo.
Informalmente se intuye que tanto el Coupé como el Roadster se mantendrán, mientras que el Clubman es el que podría desaparecer o al menos ser replanteado, ya que la introducción al mercado del mas versátil Countryman parece haberle quitado algo de sentido.
Otra de las variantes de carrocería que podría llegar en forma novedosa con la nueva generación es un sedán, un formato que podría catapultar las ventas de la marca en China. El MINI Sedán tendría mucho sentido en ese mercado, en el que ese tipo de carrocerías cuenta con gran aceptación por parte de los consumidores.