La próxima semana inicia el Salon del automóvil de Beijing y Ford ya ha anunciado que estará presentando a la versión de producción del nuevo Escort, que debutara como prototipo el año pasado.
Se trata de un sedán que revive la mítica denominación que la casa del óvalo dejara de usar hace ya varios años. Si bien en principio se creía que sería un moldeo únicamente para el mercado chino, Ford ha afirmado que sus intenciones son las de llevarlo a todo el mundo.
De tamaño similar al Fiesta sedán, el Escort promete una mejorada habitabilidad para pasajeros adultos, especialmente en las plazas traseras, que en el caso del Fiesta de tres volúmenes son esencialmente aptas para niños. De acuerdo a recientes fotografías espía tomadas sobe las unidades que estaban efectuando pruebas de rodaje, llegará a los concesionarios con mínimas diferencias respecto al concept car.
No se ha confirmado todavía cuales serán sus opciones mecánicas, para lo que habrá que esperar a su debut en Beijing. La nueva generación del Ford Escort se fabricará en China, pero también podría producirse en Sudamérica.