Cada cierto tiempo surgen iniciativas de éste tipo, que prometen motores extremadamente poderosos y prestaciones de infarto, aunque la mayor parte de las ocasiones estas propuestas se quedan en promesas y nunca llegan a concretarse.
Una firma italiana llamada Corbellati quiere sumarse al selecto grupo de fabricantes de superdeportivos, aunque en esta ocasión su origen es algo curioso, ya que se trata de una familia de joyeros con más de siete décadas de trayectoria, que ahora ha decidido incursionar en el terreno de los superdeportivos, con un coche muy exclusivo y prestacional.
Al che podremos conocerlo en el marco del Salón del Automóvil de Ginebra 2018 bajo el nombre Corbellati Missile. Se trata de un deportivo biplaza cuya fuente de inspiración han sido los deportivos de competición de los años 1960. Destaca por su frontal con grupos ópticos de formato oval, sus voluminosos pasos de rueda y su carrocería de diseño redondeado.
Corbellati ha decido apostar fuerte y promete para el Missile una cifra de potencia y una cilindrada que promete romper con todos los récords actuales. Debajo de su capó se ubicará un poderoso motor V8 biturbo de 9.0 litros de cilindrada que desarrolla una potencia de 1.800 CV y un par motor máximo de 2.350 Nm, suficiente para lograr alcanzar una velocidad máxima de 500 km/h.
El Corbellati Missile es un tracción trasera que cuenta con suspensión de dobles triángulos en ambos ejes y diferencial autoblocante. Además posee muelles neumáticos, amortiguadores ajustables, unos poderosos frenos equipados con mordazas de seis pistones y discos carbocerámicos de 394 milímetros de diámetro.
El coche cuenta con un monocasco de fibra de carbono, el mismo material que ha sido utilizado para confeccionar los paneles de su carrocería.
Para mayores detalles habrá que esperar a su puesta de largo que tendrá lugar en el Salón del Automóvil de Ginebra 2018 que se celará en unos pocos días más.