Daihatsu ha decidido recuperar la denominación Rocky, que regresa a la gama de la firma nipona tras una ausencia que se prolongó a lo largo de muchos años. Se trata de un pequeño crossover que ha sido desarrollado de manera conjunta con Toyota, que también tiene su propia versión denominada Raize.
Si hablamos de su estética exterior no encontraremos demasiadas diferencias entre ambos modelos, mas allá de los lógicos cambios en el frontal para adaptar la imagen de marca. Los Daihatsu Rocky y Toyota Raize son casi idénticos, miden apenas 3,99 metros de longitud y solo se diferencian por la parrilla, los paragolpes y los diseños de las llantas de aleación.
Dejando de lado al exterior, si nos adentramos en el interior del nuevo Daihatsu Rocky nos encontramos con un habitáculo prácticamente calcado del modelo de Toyota, en donde la único diferencia es el logotipo en el centro del volante.
En el plano mecánico todo gira en torno a un motor turbo de 1.0 litro, un tricilíndrico que desarrolla 98 caballos de fuerza y un par máximo de 140 Nm, que se combina con una caja de cambios automática de tipo CVT, tanto con tracción sencilla al eje delantero como a las cuatro ruedas.
La dotación mas relevante incluye múltiples airbags, controles de tracción y estabilidad, control de velocidad inteligente, aparcamiento asistido, alerta de pre-colisión, instrumentación digital configurable, sistema de información y entretenimiento con pantalla táctil, compatibilidad con los sistemas Apple CarPlay y Android Auto, USB, Bluetooth, climatizador automático, acceso sin llave, arranque por botón, sensores de aparcamiento, volante multifunción forrado en piel, tapicería en piel, etc.
El nuevo Daihatsu Rocky estará inicialmente solo disponible en Japón, con precios ligeramente por debajo del Toyota Raize. De momento no hay planes para llevar el Rocky a otros mercados, aunque el modelo de Toyota sí será global.