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Las normas antipolucion están cada día haciendo el juego mas difícil para los fabricantes de superdeportivos que naturalmente optan por motores de muchos cilindros y gran desplazamiento.
En el caso de Aston Martin, las cosas son todavía mas difíciles, ya que en 2014 se vieron forzados tuvo que llamar a revisión a más de 17.000 vehículos producidos entre los años 2008 y 2014, debido a la utilización de una pieza de plástico falsificada.
Al parecer, la compañía china suministraba una moldura de plástico del pedal del acelerador abría utilizado plástico DuPont falsificado. Esto significó al fabricante británico un enorme llamado a revisión que afectó al 75% de las unidades producidas durante esos años.
Pero la actual dirigencia intenta revitalizar la empresa y la alianza sellada com Daimler será fundamental para lograr el éxito. Como parte de la relación con AMG, la división de alto rendimiento de Mercedes-Benz, Aston Martin dispondrá de la arquitectura eléctrica de AMG, como así también de los motores V8 y de las transmisiones.
Sin embargo, a pesar del downsizing, el jefe de ingenieros John Caricia confirmo que su motor V12 se mantendrá en producción todo el tiempo que les sea posible, para las versiones tope de gama. Es que la estrategia no es la de ir recortando cilindros a los productos de la marca hasta finalmente acabar con un cuatro cilindros para poder cumplir con las normas de emisiones, sino que por el contrario la idea es mantener los motores V12 y lograr un balance gracias a la introducción de nuevo modelos con cero emisiones.
De hecho, el DB11, el nuevo deportivo de Aston Martn que debutará en el próximo Salón del Automóvil de Ginebra que tendrá lugar en el mes de marzo, se valdrá de los servicios de un motor V12 de 6.0 litros de cilindrada, que utilizará al menos un turbocompresor, no sólo para aumentar su rendimiento, sino también para lograr emisiones más bajas.
