Daihatsu presentó hace dos mese en Japón a la nueva generación del descapotable Copen. Es un pequeño roadster de dos plazas y techo retráctil, de tan solo 3.39 metros de longitud. Su techo puede guardarse en la parte trasera con solo presionar un botón, en una operación que transcurre en solo 20 segundos.
Su demanda en Japón ha sido altísima desde el momento de su lanzamiento, alcanzando los 4 mil pedidos en su primer mes en el mercado. Daihatsu asegura que el 80 por ciento de sus compradores son hombres y la versión equipada con la transmisión CVT es la que se lleva el 70 por ciento de las ventas. Esta avalancha de pedidos multiplicó por seis sus ventas que habitualmente son de 700 unidades mensuales.
El modelo había renovado su aspecto al adoptar un nuevo frontal que incorporó uno nuevos faros y unas luces diurnas de LED. Su carrocería combina algunos elementos pintados en color negro brillante y cuenta con la particularidad que algunos paneles de la carrocería pueden intercambiarse para brindarle un aspecto completamente diferente.
La estética se completa con unas llantas de aleación de 16 pulgadas, salidas de los escapes cromadas y un paragolpes trasero que incorpora un difusor.
Su única opción mecánica es un motor de 600 centímetros cúbicos de cilindrada, que ofrece una potencia de 64 cv, con un par motor de 64 Nm y que se asocia a una transmisión manual de cinco relaciones o a una automática CVT. Con este propulsor el Copen consume 3.9 litros cada 100 kilómetros.
Su comercialización comenzará en Japón, con un precio que incoa en los 1.798.200 yenes, los que equivalen a unos 17.600 dólares al cambio actual, para la versión que monta la transmisión manual.