Poco a poco comienzan a brotar sanciones de todo tipo para el grupo industrial alemán. Las sanciones tienen que ver con el escándalo de las emisiones contaminantes de sus motores diésel y esta vez tiene a Italia como eje principal.
Se trata del cuarto mercado europeo en importancia para Volkswagen. La agencia antimonopolio de Italia ha multado al grupo alemán en cinco millones de euros, por incurrir en prácticas de competencia desleal, como así también de publicidad engañosa, que tenía como destino desinformar a los compradores sobre los resultados de emisiones de sus vehículos diésel.
Volkswagen comercializó en Italia varios modelos equipados con el motor TDI Euro 5, alterado con un software especial que permitía burlar los controles de emisiones contaminantes. Por ello es que la agencia antimonopolio asume que si los compradores los hubiesen sabido de antemano, probablemente nunca hubiesen adquirido uno de esos modelos.
Desde el gobierno italiano afirman que la división italiana de Volkswagen ha cooperado plenamente para ayudar a determinar los hechos, pero la firma alemana ya ha anunciado que recurrirá la sanción. Aunque habiendo admitido su culpabilidad, será difícil que pueda eludirla.
Volkswagen enfrenta investigaciones en Estados Unidos, Corea del Sur y otros mercados tras el escándalo corporativo desatado luego de conocerse la adulteración de los motores.