Beverly Hills debe ser junto a la Costa Azul uno de los lugares en el mundo con mas superdeportivos por metro cuadrado. En un extraño video que no se alcanza a comprender muy bien, los enloquecidos conductores de un Ferrari LaFerrari de color amarillo y de un Porsche 911 GT3 de color blanco se lanzan a toda velocidad por las calles residenciales de Beverly Hills.
Al comienzo del video el conductor del LaFerrari incluso raspa el splitter frontal contra el asfalto, para luego salir a toda velocidad quemando neumáticos por la estrecha calle de un barrio tranquilo, seguido bien de de cerca por el Porsche 911 GT3.
Apenas unos instantes después los dos cruzan una señal de stop a toda velocidad, justo antes que el producto italiano comience a despedir un humo blanco. Acto seguido ambos entran a una lujosa casa en la cual también hay otros juguetes como un Bugatti Veyron Super Sport y un Mercedes-Benz G63 AMG. El video culmina con un coche de policía arribando a la escena, tal vez advertido por los numerosos vecinos que se agolparon al escuchar el estruendo.
Gente loca, peligrosa y con juguetes demasiado caros.