Si algo le faltaba a las carreras de monoplazas luego de varios años de decisiones cuestionables y algo de aburrimiento que afectan a la Fórmula 1, es la llegada de una nueva categoría en la que no serán necesarios pilotos, aunque al mismo tiempo promete revolucionar la tecnología relacionada con la conducción autónoma.
Se trata de Roborace, una nueva categoría de coches autónomos que formará parte del espectáculo de la Fórmula E y que ya tiene un primer prototipo de aspecto imponente. El prototipo fue diseñado por Daniel Simon, responsable del diseño de los vehículos futuristas de películas tales como Tron: Legacy y Oblivion.
Su lanzamiento tendrá lugar el año próximo y promete un despliegue de tecnología nunca antes visto, en donde el componente humano tendrá lugar únicamente fuera del circuito. La categoría dispondrá de 10 equipos, cada uno de ellos operando dos coches. Los coches serán todos iguales, y su única diferencia será el software implementado por los ingenieros.
Esto significa que podría haber lugar para una transferencia de tecnología de conducción autónoma a los coches de calle, teniendo en cuenta que los ingenieros trabajarán específicamente en esta tecnología para lograr vencer la competencia, una tecnología que tarde o temprano acabará formando parte de todos los coches que sean comercializados en el futuro.
Roborace será algo más que una batalla entre coches controlados en forma remota, ya que cada uno de los vehículos estarán programados para poder interactuar con los demás. El software que todavía está siendo desarrollado, permitirá que los coches no sólo eviten los accidentes, sino además lograr una estrategia que ser permita ganar posiciones.