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A pocas horas del inicio del Salón del Automóvil de París 2018, el fabricante checo ha revelado las primeras imágenes e información oficial de una de las novedades que estarán presentando en la cita automovilística parisina. Se trata del Škoda Vision RS, un trabajo conceptual que se presenta como un anticipo de la filosofía de diseño que adoptarán los futuros modelos RS de la compañía, una vista previa del formato que podrá adoptar la próxima generación del compacto de la firma checa, el Škoda Spaceback que ya se encuentra en plena etapa de desarrollo.
Škoda desea que el relevo generacional del Spaceback logre situarse a la par de emblemáticos modelos como el Volkswagen Golf o el SEAT León, los dos exitosos compactos del Grupo Volkswagen, para de ese modo lograr dar batalla a los Peugeot 308, Ford Focus, Opel Astra y compañía.
Exteriormente el prototipo se presenta con una imagen bien deportiva. Destacan las piezas exteriores en fibra de carbono y su aerodinámica elaborada, su frontal con grandes entradas de aire, como así también las aletas y alerones. El difusor posterior y las llantas de aleación de 20 pulgadas logran completar la imagen dinámica del conjunto. El coche mide 4.3 metros de largo y cuenta con un maletero con una capacidad de 430 litros.
En cuanto al interior, allí también los diseñadores han optado por guarnecidos en fibra de carbono, además de unos asientos deportivos con reposacabezas integrados, instrumentación digital configurable y un salpicadero de formato minimalista, destacado la pantalla flotante del sistema de información y entretenimiento situada en la consola central.
La dotación del Škoda Vision RS contempla además al asistente de voz Amazon Alexa integrado al sistema de sonido, como así también las mas recientes tecnologías en materia de conectividad y asistencias a la conducción.
Si hablamos de mecánica, el prototipo está impulsado por un sustento de propulsión híbridos enchufable, en base a un motor de gasolina 1.5 TSI que desarrolla 150 CV de potencia, en combinación con un motor eléctrico de 75 kW (102 CV). En conjunto la potencia total es de 245 CV y el sistema de propulsión funciona en conjunto con un cambio automático DSG con doble embrague de seis relaciones.
Cuenta con unas baterías de 13 kWh que pueden ser recargadas en 2,5 horas en una estación de carga o en un enchufe doméstico. Puede recorrer hasta un total de 70 kilómetros en modo puramente eléctrico y logra acelerar de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos, además de alcanzar una velocidad máxima de 210 km/h, todo ello con unas emisiones de CO2 de 33 g/km.
