Era una de las piezas más valiosas de la subasta que RM Auctions celebró estos días en un evento en Monterey, California, y el importe pagado por el comprador así lo confirmó. Se trata del Ferrari Enzo que perteneciera al Papa Juan Pablo II, que se vendió por nada menos que 6.05 millones de dólares, superando las previsiones mas optimistas.
El Enzo en cuestión había sido donado por la casa de Maranello al entonces Pontífice, para que fuera vendido en una subasta de caridad destinada a recaudar fondos para los afectados por el tsunami que tuvo lugar en Sri Lanka en el año 2005. Cuando hace diez años el superdeportivo del cavallino rampante que cuenta con un motor V12 de 660 cv fuera lanzado comercialmente, tenía un precio en torno a los 660 mil euros.
La unidad que acusa sólo 180 kilómetros en su odómetro, no solo es especial por haber pertenecido al papa de origen polaco, sino además por que se trata de la unidad número 400, es decir la última producida. Con todos esos datos no es raro entender como se pagó semejante precio, aunque su valor actual de mercado se ubica en torno al millón y medio de dólares.