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Un coche de Fórmula 1 emblemático será puesto a la vena en una subasta. Se trata del Ferrari F310 B de la temporada 1997, que utilizara Eddie Irvine y el piloto alemán siete veces campeón de la F1 Michael Schumacher. Ese año Ferrari utilizó como estandarte a los Cincuenta años de Ferrari, ya que celebraba medio siglo en las carreras y en la creación de los deportivos más emblemáticos del planeta.
En el año 1997, Ferrari estaba disfrutando del éxito en la máxima categoría con el F310 B, diseñado pensando en la aerodinámica, con grandes alas delanteras y traseras que permitían la máxima carga aerodinámica a altas velocidades.
Para este modelo en particular, los ingenieros de La Scuderia fueron capaces de reducir su ancho y alto, dando forma al monoplaza, diseñado para optimizar el flujo de aire tanto por dentro como por fuera del vehículo, para poder alimentar correctamente al poderoso motor V10, a la vez de mantener el coche estable a altas velocidades.
El Ferrari F310 B que se subasta, esta equipado con un motor V10 de 3.0 litros y 730 caballos de fuerza (número 04611192), que había estrenado en el F310, pero que en el F310 B se perfeccionó y desarrolló aún más, y se le otorgó la designación de la fábrica de tipo 046/2, caracterizado por su sonido de escape glorioso.
Mientras que el nuevo coche para la temporada 1997 fue desarrollado por John Barnard, quien dejó La Scuderia antes de que comenzara la temporada, el F310 B apareció por primera vez en la primera fecha de la temporada 1997, el Gran Premio de Australia, y rápidamente demostró su potencial, con Schumacher clasificando tercero y terminando segundo en la carrera.
Al final de la temporada, el F310 B acumuló 102 puntos, con pole positions obtenidas en los GP de Canadá, Francia y Hungría y triunfos en Mónaco, Canadá, Francia, Bélgica y Japón, además de vueltas rápidas en Mónaco, Francia y Gran Bretaña.
Este F310 B es el chasis 179, el octavo de apenas nueve construidos, y es el primero de los dos ejemplares que se habían construido con una capacidad de combustible ligeramente más alta que en las primeras unidades. Hizo su primera aparición con Michael Schumacher en el asiento del conductor en el Gran Premio de Bélgica en Spa. Schumacher luchó por encontrar una puesta a punto del coche que le gustara, hasta que logró estar tercero en la clasificación.
Eddie Irvine estuvo al volante del chasis 179 en el Gran Premio de Italia en Monza el 7 de septiembre, donde se clasificó en el décimo puesto y más tarde acabó en la octava posición de la general. Luego de su retiro de la Fórmula 1, el chasis 179 quedó en propiedad de Ferrari hasta 1999, y desde entonces ha tenido una historia documentada de un pequeño grupo de coleccionistas.
Ha participado en varios eventos desde entonces, incluyendo track days de Ferrari en el circuito de Hockenheim en Alemania en el año 2000 y en Laguna Seca en 2004, y ha sido habitual verlo en los eventos del programa F1 Clienti de Ferrari.
