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Al igual que lo ocurrido en varios mercados de Latinoamérica, el Fiat 500 arribó a Brasil inicialmente importado desde Polonia en el año 2009. Sus ventas fueron marginales durante el primer año, hasta que a partir del año 2011 el 500 comenzó a importase desde México.
Durante el año 2009 apenas se comercializaron en Brasil 1.902 unidades del Fiat 500 polaco, mientras que hacia el año 2012, cuando ya hacía un año que se importaba desde México, el 500 tuvo su mejor año en Brasil, con un total de 15.920 unidades entregadas a nuevos propietarios. Desde el año 2012 hasta el mes pasado, se vendieron en el mercado brasileño un total de 31.376 unidades.
https://www.autodato.com/2015/07/asi-es-el-lavado-de-cara-del-fiat-500.html
Sin embargo, debido a la crisis económica y a la fuerte retracción en las ventas de coches nuevos en Brasil, Fiat Chrysler Automobiles ha decidido poner punto final a la comercialización del urbano de Fiat. Es que tras la devaluación de la moneda brasileña, importar los Fiat 500 desde México ya no es rentable para la firma italiana.
Con precios que actualmente parten de los 56.900 reales (18.130 dólares) para el acabado Cult y van hasta los 94.000 reales (29.951 dólares) de la versión Abarth 1.4 16V Turbo, los Fiat 500 son demasiado caros para lograr enfrentar a sus competidores producidos localmente, por lo que su comercialización cesará ni bien se agoten los inventarios en los concesionarios oficiales.
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